Durante el período comprendido entre abril y principios de mayo, ha aumentado el número de migrantes que atraviesan la peligrosa selva del Darién para llegar a los Estados Unidos. Esta situación representa un obstáculo para los esfuerzos de Estados Unidos para detener la migración ilegal hacia el norte.
Según el gobierno de Panamá, más de 40,000 migrantes llegaron a Panamá en abril, lo que representa un aumento de más del seis veces en comparación con el mismo período del año anterior. Las cifras de migración han seguido aumentando en los primeros nueve días de mayo, lo que ha generado preocupaciones entre las autoridades sobre un aumento de los flujos de migrantes hacia los Estados Unidos, a medida que se levantan las restricciones por el COVID-19, también conocidas como Título 42.
El 11 de abril, los gobiernos de Estados Unidos, Panamá y Colombia anunciaron una campaña de dos meses para abordar la migración ilegal a través de la región selvática. El presidente estadounidense, Joe Biden, declaró que la frontera sería caótica durante un tiempo después de levantar la restricción del Título 42 a la medianoche del 11 de mayo.
Biden habló con el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, durante más de una hora sobre la seguridad fronteriza. López Obrador mencionó en Twitter que ambos líderes discutieron su compromiso de trabajar juntos en temas relacionados con la migración, drogas y tráfico de armas.
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